Mindful Eating: comer con atención plena

Hablando de terapias contextuales o de tercera generación, surgen herramientas como el mindfulness, orientadas a la atención plena y la aceptación de la experiencia. Dentro de sus distintas aplicaciones, se encuentra el mindful Eating, el arte de comer, de sentir plenamente y de estar en el presente, en el aquí y en el ahora.

Mindful Eating se define como comer con consciencia plena, en un estado de aceptación y de apertura,a través de los sentidos, elementos fisiológicos y las sensaciones que proceden de nuestros órganos internos (Fernández et al., 2021).

Veámoslo como una pausa sensorial, dejar de comer en automático para pasar a gestos íntimos y delicados que nos lleven por experiencias sensitivas satisfactorias. Imaginémonos como artistas, como un pintor que observa la luz antes de tomar su lienzo, que mira, huele y escucha su cuerpo para pintar a través de sus sensaciones. Que acepta sin juicio, saborea sus pensamientos sin culpa y reconoce a su cuerpo como un espacio de inspiración y creación.

En Mindful Eating se integran habilidades para dirigir la atención a los alimentos, las texturas, los sabores, y los pensamientos antes, durante y después de que comemos. Mejora la aceptación, la atención plena y la libertad de comer sin juicios, y sus beneficios psicológicos incluyen la autorregulación emocional y la conciencia corporal(,Fernández et al., 2021).

Desde esta mirada, comer deja de ser un medio de supervivencia y se convierte en una forma de sentir. Nos permite ver cada plato, a través del lenguaje de nuestro cuerpo, como una composición, con distintas texturas, matices, sabores, emociones, experiencias y memorias.

Permite una regulación emocional, una actitud compasiva con nosotros mismos, mayor flexibilidad y estrategias adaptativas distintas a la evitación o distracciones, en las cuales podemos llegar a caer constantemente (Fernández et al., 2021).

La ciencia nos habla y nos respalda, que mantener una actitud consciente, sin reactividad aumenta la aceptación y reduce los juicios, síntomas ansiosos y depresivos, y las conductas impulsivas. Esta herramienta la podemos encontrar dentro de intervenciones terapéuticas como la Terapia Cognitiva basada en Mindfulness (MBCT), Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT) y Terapia Dialéctica Comportamental (DBT) (Fernández et al., 2021).

Como todo arte, el Mindful Eating, no busca perfección, sino el goce profundo a través de la compasión y la curiosidad. Según Camacho  (2022), su práctica inicia desde que uno asiste al supermercado a comprar la despensa; no solo se trata de elegir productos por elegir, sino de recorrer con delicadeza los pasillos, como quien recorre un jardín, prestando y observando con atención, e inspirándonos a contemplar los nuevos colores, aromas y sensaciones que despertarán los platillos que prepararemos. Nos invita a estar conscientes, identificar los alimentos que compramos y  analizar cómo estos ayudarán a nuestro cuerpo.

Necesitamos de un entorno libre de distracciones y dejar a un lado los dispositivos electrónicos para entrar en un estado pleno de concentración. Una vez que los alimentos han sido preparados con sutileza y respeto, antes de comenzar a consumirlos, tomaremos una inhalación profunda que nos permita sentir como el aire acaricia nuestro cuerpo, entrando en contacto con nuestra realidad, masticaremos lento, observaremos nuestro cuerpo e inclusive si necesitamos cerrar los ojos, nos enfocaremos en identificar lo que está sucediendo en nuestro cuerpo: la temperatura que se expande o las reacciones que genera cada alimento.

Ya terminado nuestro platillo, podremos experimentar una sensación de gratitud y bienestar envolvente, que nos acompañará todo el día. Mindful Eating se convertirá en una rutina diaria que trabajaremos constantemente para que poco a poco se convierta en un hábito. Romperemos con lo automático, para que así, la hora de la comida sea un espacio de goce, celebración y sobre todo, reencuentro con uno mismo.

Elaborado por: Swetenia Zenil Castro.

Psicóloga en formación. Actualmente estudia la carrera de Psicología en la Universidad Anáhuac Puebla. Mantiene un profundo interés por los Trastornos de Conducta Alimentaria (TCA) y su primordial objetivo es centrarse en visibilizar la lucha interna que combate una persona en relación a su cuerpo, moldeada por estándares sociales y culturales dañinos que permean la conducta y generan patrones con la comida marcados por culpa, vergüenza e insatisfacción.

Referencias:

Fernández, C., Quiles, M., & Quiles, Y. (2021). Atención plena y conciencia corporal en un grupo de mujeres con un Trastorno de Conducta Alimentaria. Informaciópsicológica, 121, 58-70.

Camacho, M. (2022). ¿Quieres disfrutar más de tus alimentos? Practica mindful-eating. Tecnológico de Monterrey. https://conecta.tec.mx/es/noticias/sinaloa/salud/quieres-disfrutar-mas-de-tus-alimentos-practica-mindful-eating

Foto de Anna Shvets